El carbón vegetal tiene múltiples beneficios para las plantas. Conoce cuáles son y anímate a implementar este producto natural.
El carbón vegetal o carbón activado es una sustancia cuyo uso y consumo está en tendencia desde hace años. Se obtiene a través de un proceso de carbonización de madera y materiales vegetales, como la cáscara del coco. En consecuencia, la porosidad aumenta dotándola de una gran capacidad de absorción.
El carbón vegetal es comúnmente empleado por las personas en tratamientos para la diarrea y los dolores de estómago. Pero, además, tiene otros beneficios para la jardinería, no tan conocidos. Mejor Saludable asegura que esta derivación del carbón permite mejorar el suelo de las plantas, ya que se trata de un producto poroso con varios de los nutrientes de la materia orgánica de la que está hecho.
Este carbón puede reducir la lixiviación de nutrientes y bajar la acidez del suelo, entre otras cosas. A continuación, detallamos los beneficios que tiene este material para empezar a usarlo en casa y, así, para obtener un hermoso y resistente jardín.
Beneficios de usar carbón vegetal
Expertos afirman que la baja densidad del carbón aligera los suelos pesados, logrando un mejor crecimiento de las raíces, aumentando el drenaje y permitiendo la entrada de aire en el suelo. Este material tiende a funcionar igual que la cal agrícola para elevar el pH del suelo. También aumenta los niveles de fósforo, calcio, potasio y magnesio disponibles en el suelo.
Cómo utilizar el carbón vegetal en las plantas
Debes pulverizar el carbón hasta que los trozos queden pequeños, para ello tendrás que colocarlo en un saco y golpearlo con el palo de una escoba o un objeto similar.
Usa este carbón vegetal de la misma manera que un abono, esparce ligeramente y trabaja con las manos o una pala para que se mezcle correctamente con el suelo. También puedes añadir carbón fino a la pila de compost y así acelerar el proceso de compostaje. Aplica una capa de carbón luego de colocar la materia orgánica, lo que ayudará a neutralizar los olores.
En el jardín, es suficiente con 500 g de ceniza por cada metro cuadrado de jardín. De igual manera, es posible cortar el carbón de madera en trozos y esparcirlos por todo el jardín. El carbón y la ceniza absorben cualquier fertilizante que se use en el jardín y lo mantendrá por mucho tiempo, esto permite que las plantas cuenten con un suministro lento y constante.
No se recomienda utilizar carbón o cenizas en el suelo de arándanos, azaleas, rododendro o gardenias.
Con información de: www.mdzol.com