Archivo. El otrora próspero Cerro Corá de Campo Grande, gran animador del fútbol paraguayo en la década de los 90, hoy sigue sumido en una interminable crisis que se llevó por delante su estadio, su sede de concentración y hasta su participación en los torneos organizados por la Asociación Paraguaya de Fútbol. Hicimos una visita, y esto encontramos. Reportaje elaborado por Andrés Morel.
La entrada principal estaba cerrada, pero un portón trasero estaba abierto de par en par, dejando el club totalmente expuesto a que cualquiera ingrese al predio, como fue nuestro caso, ya que no tenemos relación alguna con el club. La triste realidad que encontramos es la de un club abandonado a su suerte, recorrimos las instalaciones como si estuviéramos en nuestras propias casas, sin que nadie se diera cuenta. El empastado en lamentables condiciones, los bancos de suplentes totalmente rotos, los pasillos alrededor de la cancha, llenos de agua y basura.
Recordando algunos logros del club, podemos mencionar que ganó la extinta Copa República 1993, jugó la Copa Conmebol en varias ocasiones, logrando victorias sensacionales, como el 4-1 a Huracán en Buenos Aires, o un 3-1 al pentacampeón de América Peñarol. También hizo sufrir enormemente a un Atlético Mineiro que solo pudo deshacerse del rubronegro en los penales, tras empates de 2-2 en Belo Horizonte y 0-0 aquí. Jugó en primera división por última vez en el 2001, y su última gran alegría fue el ascenso a la Intermedia en el 2009.
A partir de allí, el club, según el testimonio de varios vecinos, fue manoseado por dirigentes que solamente buscaron plata fácil a costa de un club que hoy está desangrado, y ni siquiera su estadio, el Gral. Andrés Rodríguez, ya le pertenece. El mismo fue rematado a un precio ínfimo comparado con su valor real, y el actual propietario es el empresario del rubro supermercados Osmar Torres. Incluso él es el dueño del club ahora, por encima de las autoridades electas en la asamblea institucional.
Los problemas empezaron cuando el ex directivo José Medina Sagalés reclamó Gs. 94.000.000 que prestó al club (no sabemos en qué condiciones se hizo ese préstamo). Otros nombres odiados por los hinchas del club son los de Fernando Chávez (expresidente), Raúl Fernández Lippmann (ex tesorero y hoy imputado por varias causas de corrupción en el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados). También se menciona que Juan Ángel Napout estuvo metido en todo este desastre, y aún más, existirían cuestiones políticas en el club, ya que también se involucra a Oscar González Daher. Además, muchos actos políticos se realizaron en la sede de la institución, lo cual está prohibido por ley.
En cuanto a la actualidad del club, en el año 2017 descendió de la Primera B haciendo una pésima campaña, puesto que, de los 34 partidos jugados, ganó 1, empató 6 y perdió 27. Apenas 9 puntos, contra 34 del Sportivo Limpeño, que fue el otro club que perdió la categoría. En el 2018 debía competir en la Primera C (última categoría del fútbol paraguayo), pero la APF le negó la licencia de competición debido a la crisis institucional, por lo que desde ese año está inactivo.
Este es un club histórico, dejó en alto al fútbol paraguayo en su momento, y es triste que por un caso de corrupción tenga que estar literalmente en una coma institucional. Cerro Corá significa mucho para el barrio y para el fútbol de nuestro país. Los vecinos organizaron varias manifestaciones en su momento, e inclusive hicieron quema de neumáticos y un cierre de la avenida Madame Lynch a fin de expresar su descontento con la desoladora situación.
En un último intento por salvar al club, se manifestaron frente a la sede de la Asociación Paraguaya de Fútbol, en Luque. Pero según relatan, no fueron recibidos y por ende, no obtuvieron respuesta a sus reclamos. Inclusive dos socios se encadenaron frente a la APF. Terrible realidad de un club tan tradicional.