De manera casi ininterrumpida, la Asociación Nacional Republicana (ANR), más comúnmente denominada "el Partido Colorado", ha gobernado el Paraguay, incluso con una dictadura que no goza de buen prestigio, como fue la del Gral. Alfredo Stroessner, que duró 35 años.
Desde el año 1947 hasta 1962, el poder político en Paraguay estuvo marcado por la hegemonía del Partido Colorado, conocido formalmente como la Asociación Nacional Republicana (ANR-PC). Durante este período, la colectividad, de tendencia, en teoría, nacionalista, republicana y conservadora, reinó como único partido del país.
La figura más relevante de la asociación fue el dictador Alfredo Stroessner Matiauda, quien gobernó Paraguay desde 1954 hasta 1989, cuando fue derrocado por un golpe de Estado.
El régimen de Stroessner duró casi 35 años y es considerado el segundo más largo de América Latina después de la dictadura de Fidel Castro en Cuba. Al político y militar se le acusó de tortura, persecución y de haber acogido a criminales de guerra nazi en el país. Además, de favorecer política y judicialmente a sus allegados, éstos ligados al narcotráfico y al crimen organizado, quienes fueron adjudicados, por el mismo gobierno, con cuantiosas propiedades y fincas, que inicialmente pertenecían al Estado Paraguayo.
De acuerdo con un informe de una Comisión de la Verdad, publicado en 2008, la dictadura de Stroessner es señalada de cometer más de 400 ejecuciones y 20.000 encarcelamientos, todos estos de tinte político.
El golpe de Estado que lo retiró del poder fue organizado por un grupo de tradicionalistas del propio Partido Colorado y tuvo lugar durante la madrugada del viernes 3 de febrero de 1989.
Tras el derrocamiento, Paraguay entró en una era de “modernidad política” al frente del mismo partido. Sin embargo, el nuevo sistema democrático de los años noventa trajo consigo disputas políticas al interior de la colectividad, lo que desencadenó una crisis política y económica, así como un estallido social denominado “Marzo paraguayo”, que se cobró la vida de nueve jóvenes patriotas.
Aunque el Partido Colorado siguió gobernando al país durante este período, para el año 2008 una coalición de izquierda logró llegar al poder en cabeza de Fernando Lugo. No obstante, el expresidente se enfrentó a un juicio político en 2012 y fue destituido por la Cámara de Diputados del parlamento paraguayo antes de terminar su mandato.
El poder retornó al Partido Colorado en 2013 con la figura del expresidente Horacio Cartes, también vinculado al tráfico de drogas, contrabando y asociación criminal, quien lideró al país hasta 2018, cuando terminó su período y transfirió el mando al actual presidente Mario Abdo Benítez.
Hoy por hoy, el Partido Colorado mantuvo su hegemonía con la proclamación de Santiago Peña como presidente de Paraguay, en medio de presunciones de fraude electoral, asegurando el poder de esta colectividad por otros cinco años.