Al no renovar el impuesto, Javier Milei avanza en su promesa de reducir cargas fiscales, en contraste con la creación de nuevos tributos "temporales" que tienden a perdurar. Este impuesto afectaba tanto las compras con tarjeta en el exterior como la importación de productos.
Eliminación del Impuesto PAIS en Argentina: Expectativas y Consecuencias. El 19 de diciembre de 2019, apenas unos días después de la llegada de Alberto Fernández a la presidencia, nació el Impuesto PAIS (Impuesto para una Argentina Inclusiva y Solidaria), con una duración estimada de cinco años. En contraste con otros tributos "temporales" que tienden a prolongarse indefinidamente, el presidente Javier Milei ha decidido cumplir con la promesa de eliminar este impuesto, y a partir de mañana dejará de existir. Este paso, según fuentes del Ministerio de Economía, busca aliviar la carga fiscal, reduciendo los costos internos, el precio del "dólar tarjeta" y algunos gastos en productos como Netflix, alimentos y vehículos, aunque no se espera que los precios bajen de manera uniforme.
El Impuesto PAIS: Creación y Aplicación. Este impuesto fue parte de la Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva impulsada por el gobierno de Fernández en el marco de la emergencia económica. Su introducción coincidió con la reimposición del cepo cambiario tras la devaluación de 2019. El Impuesto PAIS se aplicaba en varias áreas: al dólar tarjeta, con una alícuota del 30%, y a los importadores, con un porcentaje que llegó a ser del 17,5% bajo el gobierno de Milei, antes de ser reducido nuevamente a 7,5%. Además, los servicios de streaming, como Netflix, tenían una carga del 8%.
A lo largo del tiempo, el Impuesto PAIS aumentó el costo de ciertos servicios y productos, afectando tanto a consumidores individuales como a empresas que dependen de insumos importados. Su eliminación promete una disminución en los costos, especialmente en áreas como los viajes al exterior y las compras en dólares, lo que podría beneficiar a sectores de la economía relacionados con el turismo y el consumo de servicios internacionales.
Efectos Inmediatos y Sectoriales. La eliminación del impuesto tendrá un impacto visible en el "dólar tarjeta", cuyo precio bajará de $1686,83 a $1370,55. Esto afectará tanto a los gastos en viajes al exterior como a servicios de pago en dólares, como Netflix, que dejará de tener el recargo adicional. Sin embargo, la reducción no será igual en todos los sectores.
Por ejemplo, la Copal (Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios) destacó que la eliminación del impuesto es positiva, pero recordó que el impacto en los precios será desigual. En particular, los alimentos y bebidas seguirán siendo afectados por la presión fiscal y los costos de materias primas, aunque se espera que los productos importados experimenten una caída de precios, como ya ocurrió con la reducción de la alícuota en septiembre de 2023. Según un informe del Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, los productos importados bajaron un 2,4% en promedio tras esa medida, con caídas más pronunciadas en productos como enlatados y galletas. Sin embargo, no se espera que esta reducción se traduzca directamente en una baja en los precios de los productos nacionales.
En el caso de los autos, las automotrices ya habían comenzado a ajustar precios antes de la eliminación del impuesto, con una reducción de hasta el 4% en los vehículos importados y nacionales. No obstante, sectores como el de los neumáticos no experimentarán un impacto significativo, ya que, como explicó el gerente comercial de Neumen, los precios de los neumáticos ya venían bajando a lo largo del año debido a la alta inflación.
Impacto en la Recaudación y el Equilibrio Fiscal. La eliminación del Impuesto PAIS reducirá los ingresos fiscales del Estado. Entre enero y noviembre de 2023, el impuesto recaudó $6,1 billones, representando un 4,8% de la recaudación total. En términos del Producto Bruto Interno (PBI), este tributo aportó aproximadamente un 0,8% del total.
Para mantener el equilibrio fiscal, el gobierno deberá ajustar el gasto o buscar otras fuentes de ingresos. Aunque el Impuesto PAIS tenía asignaciones específicas para programas sociales como la ANSES y el PAMI, además de fondos para obras públicas y fomento del turismo, la eliminación del tributo implica un ajuste en el presupuesto estatal. De hecho, ya se ha comenzado a reducir el gasto en infraestructura, con la solicitud de devolver al Tesoro parte de los fondos asignados a obras públicas.
A pesar de la pérdida de ingresos por la eliminación del Impuesto PAIS, el gobierno confía en que el crecimiento económico en 2024 permitirá compensar esta caída y generar recursos adicionales. Ya se habla de una posible revisión de otros tributos, como los impuestos a los créditos y débitos bancarios y las retenciones, aunque el destino de los impuestos provinciales, como Ingresos Brutos, dependerá de las decisiones de cada gobernador.
La eliminación del Impuesto PAIS representa un paso importante en la agenda económica de Javier Milei, alineado con su promesa de reducir la carga fiscal. Aunque se espera una reducción en algunos costos, el impacto será desigual entre los sectores de la economía, con algunos precios bajando y otros, como los alimentos nacionales, no viéndose tan afectados. La medida también tiene implicaciones fiscales, ya que reducirá los ingresos del Estado, lo que obligará a un ajuste en el gasto público. Sin embargo, el gobierno confía en que el crecimiento económico de 2024 ayudará a compensar la pérdida de recaudación y abrirá el camino para futuras reformas tributarias.
Comentarios