| C.H. Spurgeon
Y conoceremos y proseguiremos en conocer a Jehová. Oseas 6:3
El conocimiento de Dios no se adquiere totalmente y de una sola vez, sino por grados, y a nosotros toca perseverar en Él e ir aprendiendo poco a poco. Aunque nuestro progreso sea lento, no hemos de desmayar, porque pronto sabremos más. El Señor, que es nuestro Maestro, no nos abandonará aun cuando seamos lentos en aprender; en verdad, no sería muy honroso para Él que la ignorancia humana fuera un impedimento para llegar a su conocimiento. El Señor se complace en hacer sabios a los sencillos.
Nuestro deber consiste en seguir la buena dirección y esforzarnos por conocerlo; no se trata de conocer esta u otra doctrina, sino al mismo Dios. Conocer sólo al verdadero Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo, es vida eterna. Esta debe ser nuestra mejor instrucción y a ella debemos atenernos para salir sabiamente enseñados. Si nos esforzamos por conocer a Dios, sabremos cómo hemos de ser sanados de nuestras enfermedades, curados de nuestras heridas y qué es la vida después de la muerte. La experiencia perfecciona la obra, cuando el corazón sigue el camino del Omnipotente.
Alma mía, mantente cerca de Jesús, esfuérzate por conocer al Señor y así llegarás a conocer a Cristo, que es la mejor de las ciencias. El Espíritu Santo te guiará en el camino de la verdad. ¿No es éste su glorioso ministerio? Cuenta con su poder, porque Él te guiará.
Extraído de: Libro de Cheques del Banco de la Fe - Promesas y palabras de aliento para cada día.
LIBRO RECOMENDADO DE LA SEMANA
La predicación Cristocéntrica | Bryan Chapell
Sea cual sea la realidad de la congregación y su interés por la Biblia, quienes se encargan del ministerio de la Palabra deben prepararse correctamente para mejorar su enseñanza a través de la predicación. En el libro La predicación Cristocéntrica, el Dr. Chapell propone una metodología y un enfoque centrados en la Escritura para responder a esta necesidad.
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