El jueves se inició el juicio en el Tribunal Superior Electoral (TSE), en Brasilia, contra el expresidente ultraderechista de Brasil, Jair Bolsonaro, quien enfrenta cargos por abuso de poder político y uso indebido de los medios de comunicación. El juicio se reanudaría el martes 27 de junio.
El fiscal electoral adjunto de Brasil, Paulo Gonet, insistió este jueves en la necesidad de condenar a Bolsonaro por abuso de poder político y uso indebido de los medios de comunicación por sus declaraciones contra el sistema de voto electrónico durante una reunión en julio del año pasado, en el inicio del juicio en el Tribunal Superior Electoral (TSE), informó la Agencia Brasil.
Si el pedido de la Fiscalía es concedido, Bolsonaro será inhabilitado por ocho años y, por lo tanto, no podrá participar en las próximas elecciones.
A entender de Gonet, Bolsonaro cometió abuso de poder público al transformar el evento con embajadores en un “acto electoral” para dar un discurso de “desconfianza y descrédito” sobre las elecciones de 2022. “El evento fue deformado en un instrumento de maniobra electoralista, traduciendo el desvío de finalidad”, señaló.
El fiscal dijo que se difundieron informaciones falsas sobre las elecciones a través de la transmisión del evento en redes sociales y en la estatal TV Brasil.
“La reunión fue regimentada para que la comunidad internacional y los ciudadanos brasileños, a través de la difusión por televisión e internet, fueran expuestos a alegaciones falsas para afectar la confianza en el sistema de votación”, concluyó el fiscal.
Durante la sesión del jueves, el abogado querellante Walber de Moura Agra argumentó que el entonces presidente lanzó ataques falsos contra el sistema electoral, incluyendo insinuaciones sobre la posibilidad de fraude y la falta de auditoría de las urnas. “Hubo una reunión con una clara desviación de propósito para desmoralizar a las instituciones, y de forma internacional. Se utilizaron bienes públicos con fines electorales”, afirmó.
El abogado defensor de Bolsonaro, Tarcísio Vieira de Carvalho, dijo que la reunión con embajadores tuvo lugar antes del período electoral, el 18 de julio, cuando Bolsonaro no era candidato oficial para las elecciones de 2022. Carvalho explicó que la reunión no tuvo sesgo electoral y se hizo como un “contrapunto institucional.”
“El presidente, sí, tal vez, en un tono inadecuado, ácido, excesivamente contundente, hizo declaraciones sobre el sistema electoral brasileño, sobre mejoras necesarias en el sistema de recolección de votos”, dijo Tarcísio Carvalho.
Asimismo, se leyó el informe del relator del caso en el TSE, el magistrado Benedito Gonçalves, quien citó otras pruebas contra Bolsonaro, como la incautación del “borrador golpista” en la casa del ex ministro de Justicia Anderson Torres. El documento preveía un decreto de Estado de Defensa en el TSE para impugnar la victoria de Lula en las elecciones de 2022.
Por otra parte, el gobierno se ha mantenido últimamente en silencio respecto a los problemas judiciales de Bolsonaro.
Lejos de Brasil, Lula se dedicó el jueves a codearse con líderes mundiales en una cumbre en París y dar un discurso sobre medioambiente en un concierto cerca de la Torre Eiffel.
Con informaciones de: es.mercopress.com / agenciabrasil.ebc.com.br