Rara vez perros, gatos y otros animales disfrutarán de las detonaciones en épocas de Navidad y Año Nuevo. Sin embargo, las personas que tienen mascotas deben hacer un esfuerzo para ayudarles a tolerar los fuegos artificiales.
¿Qué consecuencias tiene la pirotecnia?
El miedo a los petardos es algo más que común en las mascotas. De hecho, prácticamente todos los animales ven comprometido su bienestar con las detonaciones por sorpresa. Sin embargo, hay diferencias en el comportamiento general que muestran las diferentes especies que solemos tener en casa como animales de compañía.
Perros: Exteriorizan el estrés y la ansiedad por miedo a los petardos con jadeos, temblores e incluso vómitos. Otros síntomas de pánico, como intentar escapar rascando paredes, puertas o el suelo, junto con las vocalizaciones, son habituales en perros durante eventos de fuegos artificiales. Pero además, los perros pueden padecer las consecuencias de estos ruidos tanto en casa como de paseo, por lo que aumentar la seguridad en fechas navideñas y festivas, es de máxima importancia.
Gatos: Tienden a esconderse en armarios y debajo de camas y otros muebles. En general no sufren durante el paseo ya que los gatos suelen permanecer en casa. Sin embargo, dada su curiosidad e instinto cazador, debemos extremar la precaución si nuestro gato se lanza a por un petardo recién lanzado y que está a punto de explotar.
Conejos y cobayas: Se esconden, tiemblan y vocalizan.
Estas diferencias generales en el comportamiento de las distintas especies de mascotas frente a los petardos, puede hacer que el miedo en gatos, conejos y cobayas fácilmente pase desapercibido por las personas que conviven con estos animales. Por esta razón, es común que no se preste la atención que merece atajar este problema, en estas especies.
¿Qué animales se asustan con la pirotecnia?
Además de los perros, gatos, conejos o cobayas, otros muchos animales sufren los efectos de la pirotecnia. Entre ellos los caballos y otros animales de granja y de zoológicos. Pero también, la fauna silvestre e incluso las personas, especialmente aquellas que presentan trastorno del espectro autista (TEA).
¿Cómo eliminar el miedo a los petardos en mascotas? Existen fármacos que pueden ayudar a rebajar el estrés del momento, pero no suponen una cura, ni eliminarán el miedo a los petardos en el futuro.
Si queremos eliminar el miedo de nuestra mascota a las detonaciones, necesitaremos planificar un tratamiento comportamental ordenado, que incluye protocolos de desensibilización sistemática y contra-condicionamiento. Los veterinarios y expertos en medicina del comportamiento, coinciden en que la mejor prevención para evitar el miedo a las detonaciones, es habituar a los animales a estos ruidos, de manera progresiva y divertida, durante las primeras etapas de su desarrollo.
Opciones para acostumbrar a mi mascota a los petardos
Globos: Lo mejor es que los pueden explotar ellos mismos. Esto aporta al animal un control directo sobre la detonación que facilita su recuperación y una respuesta positiva. Para lograr que tu mascota interactúe con el globo puedes untar un poco de comida en la superficie. Debes poner mucha atención y cuidado para que tu pequeño animal no ingiera el globo.
Bombetas: Son petardos de baja intensidad que producen un estallido cuando impactan con el suelo. Prueba a tirar algunas mientras das de comer a tu mascota. Si está no interrumpe su almuerzo mientras lanzas bombetas, la cosa va bien.
Audios: Existen grabaciones de fuegos artificiales y otros ruidos que puedes utilizar de banda sonora mientras juegas con tu perro a la pelota o con su peluche favorito. También puedes usarlos mientras come o saca comida de un juguete interactivo.
¿Por qué no usar pirotecnia?
Riesgos para el medioambiente: Los fuegos artificiales contienen perclorato. Este compuesto tiene importantes efectos para el medio ambiente y además actúa como disruptor endocrino.
Riesgos para la salud: Existen estudios que han demostrado que los fuegos artificiales emiten gases y partículas nocivas para la salud. Provocando efectos adversos en células oculares y pulmones de animales mamíferos.
Con información de: muyinteresante.com