De la bomba atómica de Oppenheimer a la dinamita de Nobel, algunos científicos han visto cómo sus investigaciones no sólo significaron grandes avances para la ciencia y la tecnología, sino que se transformaron en vehículos para la destrucción.
El “grave error” de Einstein. Otro arrepentido de esta historia fue Albert Einstein, autoproclamado pacifista, quien antes de su muerte pidió perdón por la carta que envió a Roosevelt y que dio vía libre al Proyecto Manhattan.
Einstein también jugó otro rol importante en el desarrollo de la más mortífera arma jamás conocida por el ser humano, pues su famosa fórmula E=mc², fue una de las bases sobre las que se desarrolló la investigación atómica que permitió la bomba.
Dicha fórmula la planteó en 1905, 40 años antes de que detonaran las bombas, y en esencia establece que la energía (E) es igual a su masa (m) multiplicada por la velocidad de la luz al cuadrado (c²). Es decir que una pequeña cantidad de masa equivale a inmensas cantidades de energía.
Para entenderlo mejor, en la explosión de energía de la bomba de Hiroshima, equivalente a más de 15 mil toneladas de TNT, y en la de Nagasaki, equivalente a 25 mil toneladas de TNT, apenas se usaron unos cuantos kilos de uranio y plutonio.
Si bien su fórmula planteó el principio físico que hizo posible la bomba, fue su actuar político el que calificó como el “gran error” de su vida.
Varias veces se refirió al tema, como en una misiva a la revista japonesa Kaizo, donde explicó que su motivación para enviarle la carta al presidente de Estados Unidos fue el miedo que le producía la idea de que los alemanes fabricaran primero la bomba.
“No vi otra salida, aunque siempre fui un pacifista convencido”, escribió Einstein.
“Cometí un gran error en mi vida cuando firmé la carta al presidente Roosevelt recomendándole que se fabricaran bombas atómicas”, dijo Einstein, citado por Pauling.
“Pero había una justificación: el peligro de que los alemanes la fabricaran. Si hubiera sabido que ese miedo no estaba justificado, no habría participado en abrir esta caja de Pandora”, agregó el científico.
Fuente:
Comments