El romero es considerado una planta medicinal por los diversos beneficios que tiene, ya que además de utilizarse en la gastronomía como condimento para aromatizar, también sirve para reducir el colesterol, cicatrizar heridas, combatir la caspa, entre otras afecciones.
El romero es un arbusto propio de zonas secas y áridas, es originario de la zona mediterránea, donde también se cultiva. Sus principales países productores son España, Marruecos y Túnez. Esta planta crece con 1 a 1.5 metros de altura, se caracteriza por ser muy aromático, de color verde y con el tallo cuadrado.
Según el Dr. Jesús Bernardo García de la Unidad de Nutrición, Alimentación y Metabolismo, el romero tiene la presencia de aceite esencial, fenoles y terpenoides como carnosol y ácido carnosólico; flavonoides y minerales como calcio, potasio, magnesio y zinc.
Tiene ácido ursólico, un componente con propiedades hepáticas antioxidantes, pueden ayudar a los órganos digestivos y del hígado, además a controlar el azúcar en sangre y también es útil para reducir el colesterol.
Un artículo de la Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana respaldada por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) mencionó que se emplea en problemas de la piel, para cicatrizar heridas, aftas, sarampión y también evita la caída de pelo, sirve para lavarlo y quitar la caspa.
Gracias a las propiedades de esta planta es posible conseguir un cabello más fuerte y con acelerado crecimiento, pues con la propiedad de dilatar los vasos sanguíneos, el romero estimula el flujo de sangre en los folículos pilosos.
Esto quiere decir que al utilizarlo en el cuero cabelludo, este lo nutrirá correctamente al activar la circulación y con ello mejorar su estructura y crecimiento. De igual forma, ayudará a controlar la grasa de la cabeza, pues es astringente.
Al contribuir a equilibrar la producción de grasa para que el cuero cabelludo produzca solo lo que necesita, este se mantendrá sano y nutrido, sin excesos que provoquen que los folículos se obstruyan, lo que va debilitando el cabello que nace.
Si hay falta de grasa, la piel se reseca y se irrita. Por lo que es importante regular la secreción sebácea y limpiar a profundidad el cabello sin agredir la piel, con el fin de mantener las raíces frescas e hidratadas.
El romero consigue hidratar la piel y adicional a ello, su propiedad antifúngica evita infecciones así como su función antiinflamatoria que calma la irritación y el picor, por lo que puede ser un excelente remedio para la caspa.
¿Cómo aplicar el romero en el cabello?
Preparar una infusión con un litro de agua y 35 gramos de romero.
Hervir durante 10 minutos.
Retirar del fuego y colar el líquido.
Para aplicar la infusión, esta debe estar fría, luego se debe poner en el cuero cabelludo y repartirla por toda la cabeza.
Con el cabello húmedo hay que hacer un masaje circular y dejar que actúe durante 10 minutos, para luego enjuagarlo con agua fría.
Repetir varios días para mejores resultados.
Para el crecimiento del pelo preparando un aceite esencial
Mezclar media taza de aceite de oliva con dos cucharadas de hojas de romero.
Calentar la mezcla por 2 minutos en una ollita en la estufa.
Dejar reposar cubriendo con un paño durante 3 días.
Para aplicarlo, la persona tendrá que poner el aceite sobre el cuero cabelludo dando un suave masaje que reactivará la circulación sanguínea.
Después hay que dejar que las propiedades actúen durante unos 10 minutos y enjuagar con abundante agua.
Con informaciones de: infobae.com / elsevier.es