La coordinadora humanitaria de la ONU para Ucrania, Denise Brown, dijo estar “horrorizada” por el bombardeo del jueves contra el pueblo ucraniano de Groza, que mató a por lo menos 51 personas.
La Casa Blanca también condenó el jueves el “espantoso” ataque ruso, y resaltó la voluntad de Estados Unidos de continuar apoyando a Kiev contra Moscú.
Con el ataque “sangriento” contra el pueblo de Groza (este de Ucrania), que causó al menos 51 muertos, “las atrocidades rusas alcanzaron un nivel aún más siniestro”, declaró el jueves el jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell.
El jefe de la diplomacia comunitaria, que asiste en Granada (España) a la cumbre de la Comunidad Política Europea al igual que el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, recalcó que los ataques intencionados contra civiles son crímenes de guerra.
Borrell también elogió “la fuerza, el valor y la resistencia del pueblo ucraniano” y aseguró que la UE “se solidariza firmemente con Ucrania y seguirá apoyándola”.
El ministro ucraniano de Interior, Igor Klymenko, afirmó que las víctimas se habían reunido para asistir a una ceremonia en honor a un vecino fallecido, en Groza, un pueblo de 330 habitantes de la región de Kharkiv.
Según él, al acto habían asistido unas 60 personas y entre los muertos hay un niño de seis años.
Zelensky por su parte recordó que está en conversación con varios líderes europeos para reforzar las defensas antiaéreas ucranianas y poder proteger mejor sus pueblos y ciudades de ataques como este.
Con información de: www.infobae.com