El árbol de boldo es originario de Chile y se usa para tratar de mejorar diferentes problemas de salud, entre ellos aliviar molestias digestivas. ¿Te gustaría saber cuáles son los beneficios que el té de boldo le aporta a tu organismo? ¡Entonces no dudes en seguir leyendo este artículo!
También se le conoce como ‘boldú cimarrón’ y su nombre científico es Peumus boldus. El árbol de boldo pertenece a la familia de las monimiáceas y crece en áreas silvestres y templadas tanto de Chile como de Argentina —regiones andinas— y de Perú —en la región de la Sierra Sur—. Desde hace siglos, se consume el boldo crudo o cocido, se emplean las hojas para hacer infusiones y la corteza para diversas preparaciones. Está compuesto por aceites esenciales —cineol, eucaliptol y ascaridiol—, taninos y flavonoides. Entre las principales propiedades del boldo, podemos destacar sus cualidades:
* Expectorante.
* Sedante.
* Antiinflamatorio y analgésico.
* Antioxidante.
* Diurético y depurativo.
* Hepatoprotector, colagogo y colerético.
* Fungicida.
* Antiséptico.
* Digestivo, relajante intestinal y carminativo.
El té de boldo no está permitido en mujeres embarazadas, ya que puede inducir el aborto por estimular las contracciones uterinas, ni tampoco en el período de lactancia. Asimismo, no se recomienda su consumo en el caso de niños y pacientes con enfermedades hepáticas severas, con obstrucción de las vías biliares o con cálculos.
También queremos alertar de que pueden surgir efectos secundarios derivados del consumo excesivo o continuado. Además, en el caso de sufrir alguna condición médica, es fundamental consultar con el médico antes de empezar a tomarlo.
Si se consume en demasiada cantidad, puede llegar a ser tóxico para el organismo y provocar diarreas. Se debe beber una taza siempre en ayunas y no prolongar la ingesta más de nueve días seguidos.
¿Cómo se prepara el té de boldo? Si no lo compras en bolsitas o saquitos en una casa naturista o mercado, una buena idea es adquirir las hojas secas y molidas.
Ingredientes:
* 1 cucharada de hojas de boldo (10 g).
* 1 taza de agua hirviendo (150 ml).
Preparación:
* Calienta el agua y, cuando rompa el hervor, añade las hojas de boldo.
* Retira del fuego, tapa y deja reposar unos 15 minutos.
* Pasado ese tiempo, filtra y endulza con miel.
¿Para qué sirve el té de boldo? Si bien el uso más frecuente del boldo es para aliviar dolencias estomacales, también se emplea ante otras dolencias y patologías. Las más importantes son las que aquí enumeramos.
1- Las hojas de este árbol tienen una gran cantidad de fitoquímicos —alcanfor, limoneno y boldina, entre otros— que, según estudios, son antioxidantes que podrían tener efectos beneficiosos en el organismo. Una de las propiedades más importantes de estos fitoquímicos es que podrían contribuir a reducir los daños provocados por los radicales libres en las células.
2- El té de boldo tiene propiedades sedantes no solo para el sistema intestinal, que ayudan en casos de estreñimiento o diarrea, sino que también relaja el sistema nervioso. Por lo tanto, esta infusión podría calmar la ansiedad, los nervios y, sobre todo, para reducir el insomnio. Consulta su consumo con tu médico y bebe una taza antes de dormir.
3- Existen estudios que sugieren que la infusión de boldo actúa como protector frente al daño oxidativo hepático causado por el cisplatino, y que esta capacidad protectora se debería a la presencia en la infusión de los antioxidantes naturales, principalmente catequinas. Además, el boldo tiene la capacidad de estimular la producción de bilis en la vesícula. Este té tiene propiedades antisépticas, por ello, también se emplea en casos de cistitis, nefritis y enfermedades similares. Sin embargo, son necesarios más estudios que prueben estos efectos.
4- El sabor dulce y el leve aroma a limón de las hojas y los frutos del boldo lo ha convertido en una especia usada en la cocina chilena. Se emplea para elaborar diversos platillos y bebidas como, por ejemplo, el chicho de boldo.
El té de boldo no se debe usar como sustituto de ningún medicamento, sin el consentimiento de un médico.